Ya no confío, ni creo nada por tu culpa. Tú ! nunca sentirás lo que yo sentí por tí ¡ NUNCA ! Creí en el infinito por una vez en mi vida y vi como su fin llegaba y abría mucho más mi herida. Querido: Ésta es mi despedida para tí, que odia hasta mi odio... ¡ JODER ! ¿ POR QUÉ TE CONOCÍ ? Soy feliz, pero es que eso sólo dura unos segundos, quiero que sepas que para esta niña fuiste mucho más que un mundo.
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Suspiros olvidados