Uno de los motivos porque
quiero tanto a este perro es por sus ojos. Desde que estoy enfermo
la gente me mira de distintas maneras. En los ojos de algunos veo
temor, en los de otros
intolerancia. En los de la abuela veo
lástima. En los de papá
enojo y
vergüenza. En los de mamá
miedo y
reproche. En tus ojos
curiosidad y
misterio, a menos que creas que mi enfermedad no tiene nada que ver con que
estemos juntos en este momento. Los únicos ojos que
me miran igual, en los únicos ojos que
me veo como soy, no importa, si estoy sano o enfermo, es
en los ojos de mi perro. En los ojos de Sacha.