martes, 7 de enero de 2014

TAN BLANCA TAN AZUL

Me trajeron tu figura golondrinas joviales. Un estornudo del otoño ornamentaba tu descenso. Con retazos de la luna, criaturas celestiales le surtieron la conjura al estallido de tus besos, besos de tinta sin fin. Vos tan blanca y tan azul. Yo tan gandul, yo tan escueto (con tu séquito de locos apuntándome al pescuezo). Un mentón que se humedece entrevería su deseo, pero la fiera en cautiverio sabe bien que hay un secreto... Y es ningunear al festín. Y ese silencio tronó, cúspide de la impaciencia: No imaginan la reacción de un arlequín bonachón que no produce la aprobación de un payasito harapiento. No tarda en ebullecer la confusión del colectivo, si a la muñeca más valiosa la embelesa un forajido. Ella no supo ser Julieta, el nunca quiso ser Romeo. Y se entregaron sin rodeos al frondoso cosquilleo de lo incipiente y febril. "Si hay amor cuando aparecen las figuras más macabras y al destino el desatino los sorprende a carcajadas. Con la luna lo hubo todo y amanezco así sin nada. ¿Cómo puedo traducir la frustración a las palabras? ¡Que se lo pierda por gil!" Y ese acertijo glotón, con estómago de anfibio, se alojó en su corazón, que halló la resolución en el resguardo de un gran varón, que la amó sin titubeos. Y un relámpago pectoral, a este crónico infeliz, le dio un golpe visceral. Y ensanchó su cicatriz. Escurrió su miseria y la niebla que lo obnubiló. No escatima en violencia, y en su malestar lo sepultó. Ella vuelve con un dolor, sumergida en su interior y a él trémulo de ilación lo conduce a la inacción. Paga caras las cuentas de no haberle hecho caso al amor, y una reminiscencia lo sucumbe a la insatisfacción.

SALTA LA BANCA ME HACE Y ME HIZO FELIZ, TODO EL TIEMPO.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Suspiros olvidados